Parece que fuera algo que sólo le compete a las empresas y muchos lo reducen a donaciones a ONG, con eso, muchas empresas limpian su “mal karma”.
Lo cierto es que la responsabilidad social es algo en lo que todos deberíamos trabajar a diario. No solamente las empresas, las personas y las instituciones también deberían tenerlo como prioridad.
La RSC (Responsabilidad Social Corporativa) es asegurarnos que los impactos de nuestras acciones o políticas sean positivos para la sociedad. Es incorporar los filtros de:
- Es bueno para mis trabajadores? les mejora su dia a día en algún aspecto?
- Es bueno para mi comunidad? estoy devolviendo un beneficio a la comunidad que me acoge?
- Es bueno para el medioambiente? tengo clara mi huella de carbono? puedo reducirla? tengo mecanismos de compensación?
Son 3 preguntas que nos deberíamos hacer frente a cada decisión que tomamos, no sólo como empresas sino también como personas, como maestros, como padres, como ciudadanos.
Aunque debería ser obvio no siempre es fácil pasar por los 3 filtros, las empresas toman muchas decisiones en su día a día y pretender que todas las acciones sean responsables socialmente puede parecer una utopía pero nos podemos acercar poco a poco.
En Relevo, tenemos claro el compromiso medioambiental. Nuestras bolsas son de plástico reciclado 100%. Plástico nacional, todo el que utilizamos se lo ahorramos a nuestro ambiente más próximo.
Además, las etiquetas de nuestro producto son de papel con certificado PEFC, este sello acredita que el papel utilizado para nuestras etiquetas proviene de productores que aplican prácticas respetuosas con el medio ambiente y en línea con la política de protección de bosques europeos. Es un programa de sostenibilidad forestal.
Nuestras cajas son de cartón reciclado 100% y tiene el sello FSC, este sello promueve una gestión forestal sostenible, aceptable para el medio ambiente, socialmente beneficiosa y económicamente viable. La certificación garantiza que los materiales y los productos que llevan este etiquetado FSC proceden de bosques gestionados de forma responsable.
También cuidamos que en el proceso de fabricación se consuma el mínimo de recursos necesarios.
Nuestra planta de reciclado y de fabricación se encuentran una al lado de la otra por lo que no consumimos ningún recurso relacionado con el transporte entre plantas.
En el lavado del plástico se utiliza sólo agua, no se agrega ningún químico. Los productos químicos, que se utilizan para limpiar, la mayoría de las veces son productos tóxicos que al ser liberados contribuyen a la degradación del medioambiente. Nuestro sistema de limpieza es amigable no solo con el medioambiente sino también con nuestros trabajadores que no están respirando constantemente productos nocivos.
Pronto os seguiremos explicando nuestra contribución a los otros dos filtros con los que intentamos mejorar día a día.